La Hechicera, el Druida y el Alkimista no nos responsabilizamos de lo que pueda suceder a los náufragos y navegantes que se acerquen a la Isla Mágica, pues las Sirenas que viven en sus costas producirán en ellos un encantamiento tal con la música de sus voces, que desearán quedarse a vivir en esta isla para siempre.